YouTube, acusado de violar sus propias políticas al recopilar datos a partir de contenidos para niños
Un nuevo estudio ha vuelto a poner a Google en el punto de mira. La plataforma de transparencia y calidad publicitaria Adalytics publicó el pasado jueves su segundo informe sobre YouTube de este verano, en el que alega que el gigante tecnológico está recogiendo datos personales a partir de los contenidos catalogados como “contenidos para niños”. YouTube parece estar infringiendo así algunas de sus propias políticas relativas a la publicidad en contenidos infantiles.
El nuevo informe lanza dos afirmaciones principales. La primera es que Google recopila datos sobre los usuarios que ven vídeos infantiles (más allá de los necesarios para el funcionamiento básico de YouTube), algo que la plataforma se había comprometido a no hacer. Esto incluye la publicación de anuncios basados en datos demográficos y de comportamiento, y el seguimiento de los usuarios que hacen clic en los anuncios.
La segunda alegación, relacionada con la anterior, es que gran parte del gasto de los anunciantes va a parar a vídeos para niños, incluso en los casos en que los anunciantes intentan evitar específicamente el contenido infantil.
Las acusaciones se basan en observaciones realizadas en informes de campañas de YouTube y Google Ads compartidos con Adalytics por múltiples compradores de medios con muchos anunciantes de Fortune 500 y las principales agencias de medios en canales etiquetados como “para niños”. Entre las marcas observadas en estos casos figuran Mars, Procter & Gamble, Netflix, Apple, Ford, Colgate-Palmolive, Samsung y otras.
Mientras tanto, los investigadores han observado que "docenas de grandes empresas de tecnología publicitaria y de intermediación de datos recibieron datos de los espectadores de vídeos de YouTube dirigidos a niños que hicieron clic en un anuncio, entre las que se incluyen varias empresas que pagaron sanciones por la aplicación de la ley de protección de la privacidad infantil online de EEUU (COPPA), como Amazon, Facebook, Microsoh y OpenX", dice el informe.
Los niños podrían ser objeto de seguimiento por parte de Google
Según explican algunos medios, la instalación de la aplicación de YouTube crea un identificador persistente (denominado X-Goog-Visitor-ID) que los anunciantes pueden utilizar para dirigir los anuncios a través del servidor de anuncios de la plataforma. Por lo tanto, si un niño hace clic en un anuncio de un vídeo, como informa The New York Times, ese niño puede ser objeto de seguimiento por parte de Google o de un sitio web de terceros.
Es decir, esos identificadores persistentes hacen que se publiquen anuncios en canales de YouTube destinados específicamente a un público joven, donde este tipo de publicidad está prohibida, sin el consentimiento de los padres.
No es el primer informe que Adalytics publica sobre YouTube: hace unas semanas la plataforma acusó al gigante del vídeo online de infringir sus propias normas para las compras TrueView. De hecho, Adalytics afirma que empezó a investigar el asunto cuando trabajaba en su informe TrueView, ya que observó que gran parte de las campañas TrueView de las marcas se emitían en canales que parecían estar dirigidos a los niños. Algunas de esas marcas, a preguntas de Adalytics, dijeron que intentaban evitar poner anuncios junto a contenido infantil.
Después de una investigación más profunda, Adalytics descubrió que las listas de exclusión de palabras clave para términos como "niños" y "niños" no parecen eficaces para evitar que los anuncios aparezcan en contenido infantil, incluso cuando los vídeos o canales en cuestión incluyen específicamente estas palabras en sus títulos.
La oferta Performance Max de Google, por ejemplo, parecía colocar anuncios de marcas para adultos en canales de YouTube que ofrecen "contenido para niños", pero no es posible saber cuándo ocurre esto. Por su parte, YouTube Select, la oferta de publicidad premium de YouTube, aparecía insertando anuncios en vídeos de YouTube "para niños" con un número relativamente bajo de suscriptores.
Pero la falta de fiabilidad de YouTube a la hora de identificar o reconocer vídeos y canales infantiles también plantea posibles problemas de seguridad de los datos. De hecho, grupos publicitarios como IPG Mediabrands ya están recomendando a sus clientes que hagan una “pausa” en el uso de Google Ads y otros productos publicitarios de Google.
Google niega que la publicidad personalizada tenga cabida en YouTube Kids
Google, por su parte, niega rotundamente las acusaciones. "La publicidad personalizada nunca se ha permitido para YouTube Kids, ni para nadie que vea contenido 'hecho para niños' en YouTube desde 2020", dice un portavoz de Google a Digiday. "Este informe está sacando conclusiones desinformadas basadas únicamente en la presencia de cookies", añade.
YouTube insiste en que no publica anuncios personalizados en contenidos infantiles y se limita la recopilación de datos a lo necesario para el funcionamiento básico de la plataforma. Sin embargo, Adalytics afirma haber detectado casos en los que YouTube instalaba cookies de larga duración específicamente con fines de segmentación publicitaria y seguimiento en los navegadores de consumidores que veían vídeos de YouTube claramente etiquetados como "para niños".
Pero la plataforma también parece publicar anuncios personalizados en vídeos de YouTube etiquetados como contenido infantil. En algunos casos, incluso, parece estar estableciendo y compartiendo identificadores de seguimiento cuando los espectadores de vídeos "para niños" hacen clic en un anuncio.
No obstante, Google lanzó un nuevo Centro de Transparencia que informa a los usuarios sobre sus políticas de producto el mismo día que Adalytics publicó su informe.
Algunas aclaraciones sobre el informe de Adalytics
Es importante aclarar algunos puntos en torno a este informe, como subrayan algunos medios. En primer lugar, Adalytics no afirma que se hayan infringido las leyes, si no que siembra la duda sobre el cumplimiento de Google de sus propias normas. En segundo lugar, se refiere a datos y anuncios relacionados con contenidos para niños, y no a datos de niños o anuncios mostrados a niños. Es decir, al menos en algunos casos, los adultos podrían haber estado viendo vídeos para niños. No obstante, cabe señalar que la propia política de YouTube es "tratar los datos de cualquier persona que vea contenido infantil en YouTube como si procedieran de un niño, independientemente de la edad del usuario".
El informe tampoco afirma que YouTube tenga malas intenciones ni insinúa que Google esté ignorando intencionadamente los esfuerzos de los anunciantes por evitar el contenido infantil, ni que esté instalando cookies a sabiendas o publicando anuncios personalizados en contenido infantil de manera intencionada.
Fuentes: Digiday, AdExchanger, Videoweek